martes, 31 de marzo de 2009

64 ojos negros

Imaginen por un momento. Ejercicio fatigoso pero reconfortante. Si estan preparados, imaginen. Olviden rutina, inmediatas obligaciones e imaginen una pequena aldea de un lejano pais, lejano pero real. Sin embargo, pese a ser real sus gentes, algunos de ellos, atesoran preciadas alas. Son sus herramientas necesarias para sonar. Detras de las alas reluce fuerza y tras su fortaleza carino. Alli se refugian 32 pequenos seres que visten pantalon corto y camisa. A ellos les protege una blanca sonrisa que a capa y espada pelea contra la miseria, el abandono y la discriminacion. Imaginaron? Entonces no se detengan, de lo contrario desaparecera...

Justo y Jonathan conoceran a Maria Jojayya Addagatla, el director y fundador de Shanthidara, a las 5.00 de la manana del 23 de marzo. Ellos estan en un tuc-tuc y el encaramado en su vieja moto, tan antigua que despues de cada viaje necesita tomarse unos dias de descanso. Joji aparenta tener mas de 40 anos pero no muchos mas. Usa gafas y en uno de sus lentes se marcan dos pequenas fisuras. Lleva el bigote poblado y mide cerca de un metro setenta. El Tuc-tuc le persigue hasta llegar a su casa. El cielo empieza a aclarar y Paulie, su esposa, les recibe con una taza de cafe para cada uno. Sus dos hijas Shinnu y Sweety se presentan. La casa tiene tres habitaciones, un bano, comedor, cocina y una pequena pieza reservada para rezar. En la segunda planta una terraza con dos tanques de agua. Desde alli se ve toda la aldea, una docena de casas de similar estructura. A pocos metros de la casa se advierten unos jovenes jugando en la unica pista de Volley Ball. Varios bufalos, decenas de cabras, algunos perros y cobras blancas, negras y marrones completan la fauna. No hay mucho mas en esta aldea ubicada a 25 kilometros de la ciudad de Vishakpatanam, en el estado de Andhra Pradesh, banado por las aguas del Golfo de Bengala.

El cafe se prolonga por tres horas, hay muchas cosas que contar y explicar, aunque el asunto base es conocer el funcionamiento y significado de Shantidhara, tarea dificil. Sweety, nerviosa, se prepara para asistir al colegio. Los proximos catorce dias seran cruciales, tanto para ella como para su familia, puesto que tendra que presentar doce examenes que le abriran o cerraran las puertas a la universidad y al mercado laboral. "Son muy muy importantes estos examenes", resume Joji.

A menos de 200 metros se encuentra el hostal, lugar donde vive el resto de la familia, treinta ninos entre los 5 y 12 anos, dos chicas de veinte y otras dos mujeres encargadas de hacer las tareas del hogar. El primer encuentro con los ninos, recuerdo dificil de borrar, se produce a las cinco de la tarde. Perfectamente formados en dos filas todos esperan a Justo y Jonathan, los nuevos voluntarios. A la cabeza, dos ninas sostienen collares de flores y pinturas que les extienden por la frente y barbilla. 64 ojos negros, enormes, escrutinan a los invitados con un silencio complice de fondo. Pese a no ser la primera vez que reciben gente de aspecto distinto, no terminan de acostumbrarse y sus miradas permanecen extranadas. Sera cuestion de horas. El hostal tiene un area muy similar a la casa de Joji, y resulta insuficiente para albergar a todas estas criaturas.

Atrevesando la puerta y en la pared de la derecha aparecen las fotos de todos los ninos que viven en el hostal acompanados de sus familiares: padres, abuelos y hermanos. A pesar de ser imagenes recientes varios rostros han ido despareciendo de las postales, como en el caso de Shekar, con quien la muerte no ha sido justa. Primero su padre, luego la abuela y recientemente su unica hermana, de once anos. Desde entonces, su madre permanece en estado de shock. Una cronica mas cuyos efectos forjan la semblanza de Shantidhara.

Tras la puesta del sol todos suben a la azotea. Sentados en circulo, abren sus viejas mochilas y sacan las libretas. Un tubo de alogeno les alumbra mientras recitan, durante dos horas, las lecciones. En una esquina, Uncle Joji, acompanado de Uncle Justo y Uncle Jonathan, supervisa todo atentamente. Tras el sonido de sus palabras se oye un silencio militar. El respeto es profundo. Despues de una copiosa cena, la azotea se tapiza con pequenas mantas y mosquiteras de colores. Alli dormiran los ninos durante todo el verano.

Despues de un dia intenso llega la hora de recostarse y pensar bajo el cielo. No hay estrellas.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Dias de motocicleta

La moneda del pais, el real camboyano, esta destinado a desaparecer; su devaluacion y coexistencia con el dollar son claros sintomas. Los precios son dispares: Una habitacion individual, con bano, ventilador y televisor en un centrico hostal cuesta dos dollares, lo mismo que un carton de leche. Comer en un restaurante local cuesta siete dollares para dos personas, lo mismo que el alquiler de una moto durante 24 horas.



La alta temporada esta por concluir y mientras los precios bajan los camboyanos que trabajan en el sector buscan hacer sus ultimos trapicheos. Tim Till, de 31 anos sabe mucho de esto, como de muchas otras cosas. Por ejemplo, sabe lo que es perder a su hermano, hermana y a dos tios en la guerra. Tambien conoce lo que es emigrar como ilegal a otro pais, Tailandia, para trabajar en la construccion porque le resultaba imposible encontrar trabajo en su pais. Igualmente domina el arte de engatusar turistas para que estos le paguen la bebida y las noches de juerga.



Es en este ultimo escenario donde aparcen Justo y Jonathan. Alli estan, sentados en un pequeno local en compania de Tim Till, su amigo Yanta, y una botella del peor vino chino. Hay algo de comida: higado, pepino y un poco mas de carne. Luego llegan cuatro jarras de cerveza. A pesar de ser lunes el local esta completo. "Aqui en Camboya no importa cual es el dia de la semana, bebemos siempre" asevera con tono borrachin Tim Till. El plan se completa con la visita a una discoteca local que tambien se encuentra a rebosar de lugarenos. La noche transcurre sin mayores contratiempos.



Las afueras de Battambang son bellisimas. Arrozales, palmeras, plataneras y otros cultivos menores se repiten a lo largo de carreteras secundarias, la mayoria de ellas de tierra. Justo y Jonathan dedican dos dias a recorrer kilometros y kilometros encaramados en una motocicleta Honada Wave, de cuatro marchas semi-automatica y de color negro. El calor les obliga a buscar un bano y lo encuentran en un pequeno lago que nace de una presa, el unico del que se tiene noticia. Luego, templos, aldeas y carreteras. Asi pasan las horas y los dias. Por la tarde de la jornada siguiente y a 20 kilometros de la ciudad, el horizonte se pinta de nubes negras. En cuestion de minutos el calor asfixiante se convierte en humedad y el sol en lluvia. Las carreteras se convierten en rios y las gotas de lluvia duelen. Jonathan conduce y Justo reza. El tiempo pasa, las direcciones se confunden y ya oscuro la lluvia aumenta. La moto salta de hueco en hueco y entretanto solo se escuchan sus risas, las carcajadas retumban. Finalmente llegan a la ciudad.El tiempo, anarquico, corre. Manana estaran en Bangkok, pasado tomaran un vuelo hasta Kolkata y al dia siguiente un tren, entonces llegaran a Shantidhara, la ONG. La nueva fase comienza.

miércoles, 18 de marzo de 2009

Extranos

La isla de Ko Chang esta situada al este de Tailandia y para muchos es la ultima parada antes del paraiso, pese a sufrir el paso de los anos y la llegada de miles de turistas. "Tenias que ver hace diez anos, cuando llegabas con el ferry no habia nadie, tenias que tirarte con tu mochila al mar y buscar un sitio para dormir. Era salvaje", asegura un aleman con muchos kilometros a sus espaldas. Hoy todo es muy facil y la isla esta saturada de habitaciones, asequibles a todos los bolsillos.

Los tailandeses pueden ser muy amigables o no, pero son muy inteligentes y han aprendido a jugar con el turista joven y derrochador que cada ano visita sus hogares. Las reglas son dos: Si eres mujer el proposito es sexual; si eres hombre entonces es economico, el sexo estara subordinado al dinero. Son basicas y funcionan. Con esto bien aprendido se acercan a una nueva presa. Las presas, lejos de ser ingenuas, les desafian conociendo sus reglas. Este es el panorama. No hay rastro del espiritu aventurero y trascendental de generaciones anteriores. Europa es muy comoda y asi son sus jovenes. La crisis que se vive, en el otro lado del mundo y de la que aqui no hay noticias, parece ser solo economica, no de identidad.

Los dias transcurren sin prisas y la emocion pasa por conocer gente nueva. "Un extrano es un amigo que aun no conoces" parafrasea Alex, un aleman de 27 anos quien no se separara de Justo y Jonathan hasta que los dos abandonen la isla. Vive en Munchen, estudia medicina y su filosofia es resultado de sus viajes y experiencias, como cuando vivio seis meses como voluntario en un hospital de la India. Tambien escarmento tras pasar dos semanas en un hospital en Santamarta, Colombia, despues de experimentar con diferentes drogas.

Simon nacio en al isla de Java, Indonseia, pero una pareja de suecos, quienes no podian tener hijos, fueron hasta alli y lo adaptaron 31 anos atras. Hoy lleva rastas y trabaja como cocinero en una fria ciudad sueca. Visita desde hace cinco anos Tailandia y aun no conoce su pais natal.

Marc es ingles y su historia se desconoce. Solo se sabe el hecho de que estara hasta septiembre en la isla y prevee gastarse una fortuna a la vez que experimenta con drogas y alcohol.

Frida es sueca y tiene 21 anos. Trabaja como profesora de ninos descapacitados, especialmente con sindrome de down. Vive a las afueras en una casa de campo con tres caballos, conejos y gatos. Cuenta sus noches por hombres tailandeses.

Isabella es argentina y tiene 26 anos, es la primera vez que visita Asia. Sonrisa y bromas no se separan de ella y vive cada nueva experinecia con especial ilusion. El 13 de marzo, a las 7 de la manana y con pocas horas de sueno, Justo y Jonathan parten rumbo Camboya.

domingo, 15 de marzo de 2009

Pecado asiatico

El aire cambia y su fragancia recuerda organizacion, ocio, normas, comodidad, progreso, pecado...Bangkok es futurista asi como sus rascacielos, autopistas y medios de transporte. Pero tambien es ancestral: cultura, majestuosos templos y tradicion milenaria. Justo y Jonathan no tardan en adaptarse a este nuevo pais, antagonismo de ese mundo llamado India. Kao San Road es el refugio de cientos de turistas que dia a dia llegan a la capital tailandesa en busca de exoticos lugares: combates de Thai boxing, locales de masajes o estrafalarios burdeles. Precisamente, el martes cinco de marzo, la recien llegada pareja se encuentra en uno de estos lugares: un combate de Thai Boxing en el Rajadammen Stadium con capacidad para cinco mil personas.

Las entradas oscilan entre 1000 y 2000 Thai baht y logicamente los asientos mas populares se llenan rapidamente mientras en el segundo anfiteatro se apelotonan los corredores de apuestas. Mas abajo, en los pasillos que conducen al cuadrilatero, se encuentran familiares y miembros de los equipos de ambos luchadores. En los laterales, junto a los arbitros, estan los asientos de primera clase reservados practicamente en su totalidad para los extranjeros. En todo el recinto resulta dificil encontrar rostros femeninos.
El septimo combate es el plato fuerte de la noche y la pelea no defrauda. Musica de tambores enfurece el ambiente como los gritos que vienen desde las tribunas. Segundos antes de terminar el quinto y ultimo asalto, el arbitro detiene la pelea y levanta el guante de color rojo. Su oponente vestido de azul y con la cara ensangrentada no puede seguir. Hay sangre, gritos, golpes y violencia pero lo realmente sorprendente es la extrana cordialidad que existe entre los competidores. Con el decimo combate la noche termina y los aficionados abandonan en silencio las inmediaciones del estadio.

Son las nueve de la manana del dia siguiente y Justo y Jonathan corren calle abajo persiguiendo el autobus que les llevara hasta Ko Chan. Milagrosamente logran alcanzarlo.

jueves, 12 de marzo de 2009

Guerra: maldita costumbre

"Camboya no es Tailandia, Camboya no es como ningun otro pais; esto es Camboya", advierte repetidas veces una voz autoritaria. Estamos en el paso fronterizo por el oeste entre Camboya y tailandia, lugar de obligada espera para obtener el visado de entrada. El tramite es una larga cadena de comisiones: Un dollar al de la gorra negra por una firma; dos verdes al de las sandalias por un sello; otros dos billetes a quien sabe quien por cada foto; asi hasta pagar 30 USD. No esta mal, en las oficinas de turismo cobraban 50.

El papeleo se realiza en una mugrienta oficina de escazos 15 metros. Tres ventiladores, a punto de jubilarse, un escritorio color marron tierra y dos sucias ventanillas adornan el local. En las paredes varios carteles advierten: "Nuestras hijas no son ningun juguete sexual". La habitacion esta vigilada por cinco honarables miembros del cuerpo policial. Este cuadro recuerda una pelicula de Oliver Stone.

Camboya es un pais de 14 millones de habitantes y sus continuas guerras, propias y ajenas, han dejado como fruto un joven y pobre pais que vende los horrores de su pasado como principal atraccion turistica: campos de matanzas, museos de guerra y otro escabrosos lugares. Durante 1975 y 1979 cerca de dos millones de camboyanos murieron a causa de las políticas de exterminio de lo que el lider Pol Pot llamó "el enemigo oculto", es decir, todo aquello que consideró contrario a su plan de construir "una nueva Camboya comunista". Dicha acción generó otro tipo de consecuencias como hambrunas y epidemias que nunca fueron atendidas. A esto se le sumaran los conflictos en las fronteras con Tailandia, Laos, Y Vietnam. Hoy el Reino de Camboya vive un periodo de calma aunque esta sumergido en una pacifica pero peligrosa invasion china, que con sus inmensos tentaculos abraza todos los sectores: "Hay mas chinos que camboyanos en nuestro pais", acusa una silenciosa voz.

El viaje continua con direccion Siam Reep, estado al noroeste del pais. En el recorrido se descubren nuevas caras sobre este hermoso pais y sus costumbres. El nuevo regimen, con apellido de democratico, prohibio recientemente todo tipo de apuestas en todo el territorio. Todavia qui resultaba muy comun apostar familias o viviendas en todo tipo de eventos: peleas de gallos, cartas, futbol, o cualquier otra actividad, como las increibles peleas de grillos. El alcohol es otro problema y su consumo es masivo. "Tengo muchos problemas en mi cabeza y se que no deberia beber tanto pero tengo que hacerlo para no pensar", explica Lucky Two, un camboyano de 28 anos que trabaja como conductor de un Tuc-Tuc. Su jefe es un chino, dueno del hostal Hilton, quien le paga 30 dollares mensuales por 18 horas diarias de trabajo. Lucky Two, logra sobrevivir con lo que recibe de los turistas por sus servicios de guia y chofer.

Doce horas despues el viaje concluye y solo queda descansar.

martes, 3 de marzo de 2009

Kolkata ciudad de cuervos

Decenas de cometas anuncian la llegada a la estacion de Kolkata, antigua Calcuta, ciudad que ha experimentado grandes transformaciones. La que fuera una desconocida aldea a orillas del Hooghly, afluente del Ganges, es hoy una vibrante metropolis que desde 2001 es la capital de Bengala Occidental, el unico estado indio de gobierno comunista. Justo y Jonathan, toman uno de los tipicos taxis amarillos que les llevara hasta su hotel, a espaldas del New Market, el centro comercial mas conocido de la ciudad.

El discreto hostal Capital sera su hogar durante tres noches a un precio, previa obligada negociacion, de 1200 rupias. Una ganga. Cientos de "Guest House", hostales muy sencillos, albergan a turistas de distintas edades y de todas partes del mundo que llegan hasta aqui. Un gran porcentaje de ellos son cooperantes. Vienen en busca de respuestas y experiencias. Se mueven en grupo y prefieren permanecer distantes del resto de "occidentales", en un intento por mimetizarse con esta cultura. El restaurante Blue Sky Cafe, dos locales expendedores de bebidas alcoholicas, chatarreros, puestos de comida, pordioseros y vendedores de hash y marihuana rematan el barrio. El espiritu de ciudad comerciante corre por sus arterias y en sus puestos callejeros es posible encontrar lo inimaginable. Sus zonas urbanas tienen un encanto especial. Mansiones senoriales y edificios coloniales venidos a menos, avisan de su decadencia mientras el bullicio de sus bazares aumenta.

Son las siete de la manana del lunes 2 de marzo y un borracho de 49 anos y de nombre Ravisingh busca turistas. Ofrece rincones de la ciudad que no aparecen en ninguna guia a cambio de una fria cerveza, todo un lujo en la India. Camina en direccion al centro, alli debe recoger la pension de su cunada de 89 anos quien a pesar de no tener dientes adora comer pollo. Ahora cobra un subsidio como veterana del ejercito ingles. A primera hora y sin coches en las calles Kolkata luce como una ciudad tranquila y caminar por el parque Maidan, de 400 hectareas, resulta muy agradable.

Con el transurso de la manana su fachada cambia. Cuervos y mas cuervos sobrevuelan la ciudad. las aceras son abarrotadas por barberos, vendedores de frutas y flores, mendigos y personas que pasivamente transitan sus calles. Han pasado 61 anos desde que la madre Teresa de Calcuta visitara por primera vez las barriadas de la ciudad. Entonces escribio en su diario: "Habia ninos y ninos por todas partes, cuanta pobreza y miseria; que sufrimiento. Hable muy poco, solo habia tiempo para atenderles y tomar cuidado de ellos". Hoy la sensacion es la misma: que sufrimiento.

Dieciseis millones de personas son muchas para una ciudad y pareciese que solo el caos sea la fuerza que mantiene la viabilidad de la urbe. El Indian Coffe House, parece un espejismo. Es tranquilo y su aire universitario e intelectual es refrescante. En cada mesa se intenta arreglar el mundo. De oeste a este, Justo y Jonathan han pasado ocho dias de intensas emociones. Han caminado de arriba a abajo cada una de las ciudades visitadas. Caminar es la mejor manera de no pensar, no comparar, no criticar. De hablar con la gente, de experimentar, de criticar. Y entonces de volver a caminar.A las 9.50 de la manana del 4 de marzo, el avion de la compania aerea Druck Air sale direccion Bangkok.

Justo y Jonathan tienen asientos para ese vuelo.

lunes, 2 de marzo de 2009

Tras las huellas de Budha

Hoy sera un dia muy largo, concretamente tendra 29 horas. El tren que parte de madrugada les llevara, o por lo menos lo intentara, a Bodh Gaya, la ciudad mas sagrada para los budistas ubicada en el estado de Bihar & Jharkhand; una de las regiones mas pobres e inseguras del pais. El expresso llegara con una hora y media de retraso, algo habitual en futuros viajes. En la estacion y aun a oscuras, Jonathan y Justo conocen a Lionel y Miki, un joven suizo y una chica japonesa, recien licenciada en derecho, respectivamente. La puntualida y comodidad del primer tren fue tan solo un espejismo, y los responsables de aquello son buscados por irrespeto a la ideosincracia india.

En el coche S7 del Poorvana Express hay un sobrecupo de al menos 40 personas; las piernas se encogen y los cuerpos se estrechan durante cuatro horas. A medio camino, un hombre italiano rumorea que el tren no llegara a Bodh Gaya debido a una huelga. No hay ninguna informacion por parte de la tripulacion pero la noticia esta en boca de todos los pasajeros quienes bajan en la siguiente estacion, Dehri; pueblo lo suficientemente pequeno para no aparecer en el mapa. Justo, Jonathan y Lionel incredulos abandonan la estacion en busca de algun otro transporte que les lleve hasta su destino. Una hora despues, dos budistas llegados de Sri Lanka, les proponen compartir un Jeep que por 1800 rupias les acercara hasta la ciudad, 380 por cabeza. Llegaran a las 15 horas.

Quien es Lionel? Despues de 10 anos de trabajar como ingeniero tecnico para varias televisiones suizas este joven decidio hacer borron y cuenta nueva. Desde entonces lleva 18 meses recorriendo el mundo en busca de un nuevo camino. Aun no lo ha encontrado pero esta mucho mas cerca. Todavia viajara seis meses. En Bodh Gaya permanecera diez dias en algun templo budista, en los mismos lugares donde Siddharta Gautama, en el ano 566 A.C., y convertido en Buda, alcanzo la iluminacion.

Este pueblo de 30.000 habitantes respira paz y esta custodiado por el monumental Buda, figura de 25 metros de alto. El punto neuralgico es el Mahabodhi Temple, rodeado por escenas de la vida de Buda representadas en torno a una imponente torre piramidal. A escasos metros queda el Bodhi Tree, el arbol sagrado bajo el cual medito Buda antes de alcanzar su iluminacion. La tarde transcurre con demasiada tranquilidad para ser India. Despues de cenar por 240 rupias, ya sin Lionel, se dirigen rumbo a la estacion para tomar el siguiente tren, direccion Kolkata, programado para las 23.05.

Los viajes en tren dan una nueva dimension a la emocion de descubrir el pais. La red de Indian Railways es la cuarta mas extensa del mundo, con vias que cubren mas de 108.513 kilometros y transportan una media diaria de 13.000.000 de personas. Las estaciones son tambien refugio de desamparados. La anarquia y basta presencia humana resulta realmente agotadora. Sin saberlo Justo y Jonathan, tendran que pasar toda la noche esperando en la plataforma numero tres por un tren que nunca llegara. A pocos kilometros un vagon descarrilado ocasiono un colapso en todas las rutas.

Al amanecer los ninos empiezan a trabajar en las vias. De un vagon cargado de carbon, un nino se desliza hasta tocar los rieles. Cenizo de los pies a la cabeza, recoge pequena piedras que acomoda en un costal. A pocos metros una nina, de escazos ocho anos lava en compania de su madre varias piedras con el agua acumulada a la orilla de los rieles. Estos charcos son una acumulacion de todos los escrementos que salen expulsados desde los banos de los trenes.A las 8.00 de la manana, y con pocos minutos de sueno robado, hay noticias: El Chambal Express direccion Kolkata llegara en 50 minutos. Alegria.